13 marzo 2007

LA COMPRA

Soy muy poco aventurero a la hora de hacer la compra, y no me entretengo escudriñando etiquetas para comparar los ingredientes de cada envase, sopesando aquellos menos nocivos para el colesterol o los triglicéridos, escogiendo los más fibrosos para acudir al baño inmediatamente después de su ingesta, ni calculando sus aportes calóricos o su contenido en medio abecedario de vitaminas, ni en concentración de probióticos…, sino que me lanzo al “sota-caballo-rey” de siempre.

Pero hace un tiempo, empecé a sospechar que algo estaba mal colocado en el supermercado: la primera fruta que me encontraba eran unos hermosos plátanos a por los que inmediatamente solía estirar la mano intentando encontrar una maza que tuviera menos de cinco (nunca piensan en los “singles” al embolsar la fruta). Pero veinte pasos más adelante, volvía a toparme con más plátanos, hasta que, escamado, descubrí que los primeros eran de Brasil y los segundos de Canarias; o sea, “los nuestros” tenían menos posibilidades de ser vendidos -al menos a clientes tan despistados como yo-. A partir de confirmar esta desafortunada ingerencia en la voluntad del consumidor poco atento, decidí prestar más interés por el origen de los productos y elegir aquellos que mejor apoyaran la producción local o, al menos, la más cercana. Así, casi tuve que desmontar una estantería para encontrar una lata de auténtico espárrago navarro; descubrí que las anchoas que creía vecinas de Santoña tuvieron acento chileno; de las seis clases de patata, sólo una provenía de nuestra Llanada; aquellas chuletas tan sabrosas, -y tan caras-, resultaron ser argentinas; los vinos de Rioja, la nuestra, se mezclaban peligrosamente con cualquier bebedizo californiano. Por no hablar de lo viajadas que están la verdura, la fruta o algunos pescados. ¿De qué sirve, me pregunto, tanto Label si nuestros productos se relegan a la segunda fila?

Eso sí, sigo sin tener claro a qué llaman ‘consumo responsable’: ¿a lo del espárrago navarro o a lo de los probióticos esos?

Fecha publicación: 13-III-2007

Listening To The Music:
HIDROGENESSE: Disfraz de tigre, 2007