23 enero 2007

¿ RIFA ?



Nunca llueve a gusto de todos (ya es bastante con que llueva). Estaríamos buenos si la ciudadanía tuviera que votar por cada una de las iniciativas que se debatieran en un pleno municipal, foral o autonómico, a instancia de los grupos políticos que elegimos cada cuatro años para desempeñar por nosotros esta función. Les delegamos la soberanía para que velen por nuestros intereses, confiando en que trabajen en procurarnos una vida mejor.

El problema surge cuando quienes administran nuestras opciones políticas no se ponen de acuerdo en el proyecto que sus electores tuvieron en mente al votarles. Ante esta pérdida de confianza, la democracia prevé alternativas que tratan de devolver al pueblo la oportunidad de enderezar el debate. Esto debería ocurrir cada vez que un plan municipal, por ejemplo, produzca alteraciones graves del normal devenir ciudadano, injustificados desembolsos de sus arcas y/o, como ahora en Vitoria, desacuerdos políticos generen improductivos debates ante proyectos concretos.

Aciertan al intuir que hablo de la reforma de la plaza virginal, pero podría aplicarlo igualmente al soporífero debate de proyectos ya muertos y enterrados sin haber obtenido rentabilidad alguna a los millones gastados, que no concretaré para evitarles el mismo dolor de estómago que yo al recordarlos. Hasta las narices nos tienen de debates inertes; entre los unos, que se ahogan acusando de electoralismo oportunista, de indemostrables pelotazos o de gobernar mirando al cielo, y los otros, que venden antes de comprar y que se cierran en banda desoyendo las opiniones que llenan a diario columnas de opinión, tertulias radiofónicas o protestas callejeras. No queremos que nos expliquen ‘el proyecto’ tildando la consulta popular de tómbola o rifa. La ciudad ya está harta y quiere elegir su propio proyecto, optando entre todas las alternativas posibles, debidamente documentadas, para que el gobierno y la oposición ejecuten -a la chita callando- aquella que más sufragios obtenga. Si los políticos no se ponen de acuerdo, el pueblo siempre sabrá cómo hacerlo.


Fecha publicación: 23-I-2007

listening to music
DEPECHE MODE: A Question Of Time, 1986