24 enero 2006

DIVERSIDAD FUNCIONAL

Resulta increíble comprobar cómo, a veces, con el tiempo, algunas palabras acaban adquiriendo valores peyorativos que en su momento nunca tuvieron. Lo constaté hace unos días al leer la carta de un ciudadano al recientemente fallecido fundador de un colectivo que actualmente reúne a discapacitados intelectuales, aunque en su momento, él lo citó así, se denominaban subnormales. Imaginen lo que ha podido cambiar esta palabra, que incluso ha adquirido matices notablemente negativos e insultantes.

La evolución de la mentalidad social, afortunadamente, ya contempla de otra forma a las personas con algún tipo de diferencia física, mental o de cualquier otro tipo, con respecto a la de la media – puramente estadística - de la sociedad en la que viven. En un intento de evitar la carga de negatividad y la discriminación que lleva inherente la propia terminología, un grupo denominado Foro de Vida Independiente, está tratando de popularizar la expresión “Persona con Diversidad Funcional”, y su acrónimo “PDF”, para sustituir la negatividad de términos como subnormal, anormal, minusválido, incapaz y discapacitado... Así, hablaremos de hombres y mujeres con diversidad funcional física, visual, mental o auditiva, que puede ser circunstancial y/o transitoria.

Este Foro de Vida Independiente, entiende que la Diversidad Funcional englobaría a todas las personas, lo que hará que sea “aceptada como una riqueza más dentro de la diversidad de la especie humana”. Además de las instituciones públicas y las entidades privadas, cada persona a título individual, debería entender que nuestra diversidad es sinónimo de riqueza, de forma que no sólo realizaríamos esfuerzos más conscientes en eliminar todas las barreras, sino que por pura practicidad, evitaríamos crearlas al entender que también entorpecen nuestra propia funcionalidad.


Fecha publicación: 24-I-2006